Cada vez más artistas plásticos eligen zona norte para instalar sus talleres

Pintan cuadros con flores mágicas, mosquitos gigantes, pajonales del Delta o simples macetas, pero inspirados en la naturaleza que los rodea. Se trata de un grupo de artistas que sigue la tendencia de instalar sus talleres en la zona norte, cada vez más un polo de atracción para creativos, que se suma a los ya consagrados circuitos de la ciudad de Buenos Aires, como el Distrito de las Artes o Palermo.

Maggie de Koeningsberg y Duilio Pierri trabajan en una casona de Don Torcuato; Adrián Paiva, en una isla del Delta, y Victoria Gutiérrez, en un galpón que comparte con otros jóvenes en Beccar. Pero la lista de pintores y escultores de diferentes edades y generaciones que viven o tienen sus talleres en este polo abarca también, entre otros cientos, al escultor Norberto Gómez (Olivos) y a los artistas plásticos Enrique Burone Risso (San Fernando), Richard Sturgeon (Pilar) y Sol Storni (Nordelta).

Algunos nacieron en la zona y nunca pensaron en mudarse; otros llegaron para alejarse del ruido de la ciudad o impulsados por cuestiones económicas. El común denominador es la necesidad de estar cerca del verde para crear.

El matrimonio de Duilio y de Maggie se mudó a Don Torcuato cuando era aún una zona barata y buscaba un lugar para criar cuatro hijos. Y pintar. “Nos gustó la arboleda y que era un área agreste”, recuerda Pierri. Lo primero que hicieron fue construir un galpón-taller en medio del parque. Desde entonces, pasan la mayor parte del día allí, pintando o dando clases. “Yo estudio las plantas, me dan el ritmo necesario para hacer flores surrealistas, de ensoñación, de cuento. Ésa es la clave que me lleva a hacer mezclas, sacar mil verdes”, expresa Maggie, oriunda de Retiro, una artista empecinada en recuperar los paisajes, ganadora del 3° Premio Municipal Manuel Belgrano.

Pierri, criado en Villa de Parque por una familia de artistas, cuenta que en un principio fue duro el cambio, que en el taller hacía tanto frío que tenían que colocar alfombras en el piso como aislantes. También se inspira en la naturaleza pero para crear bosques, mosquitos estrafalarios y paisajes patagónicos o pampeanos con caciques que luchan contra moscardones vestidos de militares. “La pintura es una disciplina y empecé a trabajar distintos estilos. Me baso en la naturaleza que me rodea, la literatura, los comics y los libros de historia” dice Pierri, Gran Premio de Honor del Salón Nacional.

En Tigre, sobre el arroyo Reyes y en una casilla montada sobre maderas, trabaja y vive en soledad Adrián Paiva. “Mi primer contacto con la zona fue a los 25 años. Después, con la crisis del 2000, conseguí este terreno a buen precio y decidí quedarme para siempre. Es un lugar que me permite una tranquilidad única“, relata Paiva, nacido en Pablo Nogués, que ahora pinta inmerso en humedales y pajonales invadidos por ligustros, fresnos y sauces.

“En invierno, para pintar aprovecho la luz del sol. A la tarde comienza a hacer frío y me tengo que meter adentro”, explica el artista ganador del Premio Adquisición de Pintura del Banco Ciudad 2015. Si bien debe sortear a diario dificultades como el mal funcionamiento del bombeador de agua o la subida del río, hay experiencias que no cambiaría por nada: “A la mañana se llena de gallinetas mi jardín y disfruto de darles de comer. Cuando oscurece, me quedo mirando el cambio de los tonos del otoño para luego pintarlos”, ejemplifica.

Victoria Gutiérrez trabaja desde hace siete años en un enorme galpón recuperado de Béccar. Comparte el alquiler con otros artistas. Cada uno tiene en su espacio propio con una terraza en común desde donde se divisa casi todo el barrio. “No soporto la ciudad y por eso jamás podría tener mi taller en otro lugar que no sea éste. Lo elegí porque está cerca de mi casa en el Bajo de San Isidro”, asegura Gutiérrez, que reparte su tiempo entre sus cuadros y la enseñanza del yoga. En sus pinturas, de estilo abstracto, hay macetas y paisajes y, si aparecen personajes, generalmente no son humanos, son sólo criaturas.

La lista de creativos que trabajan en la zona norte es mucho más extensa y abarca, entre cientos, al escultor Norberto Gómez, de Olivos, y a los artistas plásticos Enrique Burone Risso, en San Fernando; Richard Sturgeon, en Pilar; Antonia Guzmán, en Del Viso; Juan Astica, en Florida; Guillermo Roux, en Martínez; Sol Storni, en Nordelta, y Juan Batalla y Dany Barreto, en Maschwitz.
Talleres que se abren al público

Durante dos fines de semana seguidos, desde el sábado próximo, más de 200 artistas de San Isidro participarán de la actividad Puertas Adentro abriendo sus talleres, trabajando en vivo y enseñando al público sus procesos creativos, motivaciones, técnicas y materiales. Con la organización a cargo de la Municipalidad de San Isidro, también habrá muestras para todas las edades, música en vivo, teatro, cine y charlas con los autores. Puertas Adentro se realiza gratuitamente de 15 a 19. El mapa con la ubicación de los espacios y la reseña completa de las actividades puede bajarse de www.sanisidro.gob.ar. NR

Fuente: La Nación