El Garrahan llegó a los mil procedimientos de una quimioterapia que salva la visión en niños

El Hospital Garrahan tiene otro motivo para celebrar: llegó a los mil procedimientos de una quimioterapia que permite salvar la visión en niños con retinoblastoma, un tipo de cáncer ocular. La importancia de este logro radica en que “este procedimiento tiene un 98% de curación, evita segundos tumores y posibilita la conservación de la visión”, según indicó la institución en un comunicado.

El nombre técnico es “Quimioterapia intra-arterial para el tratamiento de retinoblastoma” y el Garrahan es el único centro público que la realiza en Argentina -y uno de los pocos en Sudamérica-. Consiste en administrar la droga en forma directa a la arteria oftálmica (encargada de irrigar la sangre al ojo), lo que permite que llegue una mayor concentración del fármaco al tumor, se utilice menor cantidad, aumente la efectividad y disminuyan los efectos adversos. Así se suplanta la radiación externa.

¿Cuál es el salto de calidad? Que la radiación implicaba segundos tumores y un alto porcentaje de necesidad de extirpar el ojo enfermo. Esta quimioterapia permite que los pacientes -usualmente menores de dos años- conserven tanto el ojo como la visión (en la mayoría de los casos). De esta manera, “esto hace posible en los ojos tratados mejor agudeza y campo visual, y un aumento en la capacidad visual que posibilita el normal desarrollo y una vida plena”, aseguró la jefa de Oftalmología, Adriana Fandiño.

El retinoblastoma es uno de los tumores oculares más frecuentes y complejos en la infancia. Se presenta con la aparición de células malignas en la retina del ojo y es muy agresivo. Para detectarlo en forma precoz se emplea el estudio de fondo de ojo con dilatación de la pupila, que está indicado para todos los niños antes de los 3 meses de vida. En Argentina se detectan 45 nuevos casos por año, de los cuales un 80% es derivado al Hospital Garrahan. NR